Galvin se perdió de sus dueños. Estaba muy asustado y corría sin parar intentando encontrar a su familia. Es un perrito de 10 años que había sido maltratado por eso es muy asustadizo, pero es muy manso y sumiso. Gracias a Edu y a su hermana, Galvin está ahora en casa, y su familia está muy contenta y agradecida.