Pipo tiene 8 años y tiene leishmania controlada. Cree que nadie lo va a querer y yo pienso que alguien maravilloso va a darle una oportunidad. Uno de mis sueños que quiero que se cumpla este año es, que una buena familia adopte a Pipo. Es muy pequeño, 4 kg, está castrado y es muy simpático y cariñoso. Un amor de perrito.
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